Nadie educa a nadie —nadie se educa a si mismo—, los hombres y mujeres se educan entre si con la mediación del mundo.
Paulo Freire

Desde un enfoque dialógico del aprendizaje, donde se promueve la reflexión sobre las prácticas de enseñanza, emerge con fuerza la importancia que juegan las situaciones de interacción para fortalecer el quehacer pedagógico y la actualización profesional desde una relación de igualdad, donde todos y todas tenemos conocimientos y experiencias que aportar.

Promover este ejercicio de actualización y reflexión mediante comunidades virtuales de aprendizaje implica re-significar la comprensión del lenguaje como una práctica social, no mecánica ni transmisiva, que se enfoca en la construcción colectiva del conocimiento.

En este marco el Programa Suma +, iniciativa del Ministerio de Educación en la que Costadigital colabora con en la implementación de recursos digitales para el aprendizaje, busca fortalecer el trabajo docente en el ámbito de las matemáticas formando comunidades de aprendizaje reflexivas para co-construir saberes que orienten el proceso de enseñanza y aprendizaje de las matemáticas y con ello resignificar las prácticas docentes.

Resulta relevante también pensar qué condiciones deben tener estas comunidades virtuales de aprendizaje para que se constituyan en espacios democratizadores, dialógicos y reflexivos, donde el intercambio y el flujo de información favorezca la construcción social del conocimiento.

En el nuevo escenario social, económico, político y cultural marcado por la globalización, las comunidades virtuales de aprendizaje precisan ampliar el concepto de educación, lo que implica transitar desde enfoques tradicionales, entendidos éstos como depósito de información para transitar a espacios de aprendizaje dialógico, permitiendo nuevas comprensiones respecto a cómo se aprende y construye conocimiento profesional. Aquí cobra mucha importancia la colaboración, la circulación de saberes y experiencias, donde se puedan crear redes donde los participantes puedan constituirse ellos mismos en equipos de trabajo y afirmar su identidad como grupo. 

Las comunidades virtuales de aprendizaje, entonces, son una oportunidad para transformar las prácticas pedagógicas basada en una concepción comunicativa, a partir de la cuál las personas y sus interacciones son el camino de transformación y mejora.