Esta exposición de trabajos dio el cierre al primer ciclo formativo de este innovador taller.

Nos hemos acostumbrado a pensar que la robótica, y en específico la creación de cualquier tecnología, está relegada a un laboratorio con un equipo de numerosos expertos de bata blanca. Precisamente este es el mito que Costadigital PUCV quiere derribar al habilitar espacios comunitarios donde la indagación tecnológica esté al alcance de todos los interesados.  

Desde el año 2018, la comuna de Quillota cuenta con un taller de robótica gratuito en el Centro de la Promoción de la Salud y la Cultura destinado a adultos de diferentes profesiones. Esto la convierte en la primera comuna a nivel nacional que cuenta con un espacio de estas características.

Para este año 2019 gracias al apoyo del Fondo de Solidaridad e Inversión Social (FOSIS), Costadigital PUCV, Oficina de las Juventudes y la Junta de Vecinos del sector, se pretende continuar el trabajo del año pasado y profundizar ciertos contenidos sobre electrónica y programación física, de esta forma, los fondos fueron utilizados para comprar equipamiento y materiales al taller.

“Acá hay una apuesta con mucha visión de futuro. Definitivamente este espacio es un aporte para los niños y niñas, para que vean el mundo de otra manera y así comprender el funcionamiento de las cosas”, dice Luis Rivera, Director Regional del FOSIS.

En efecto, se renovó la convocatoria para este año con excelentes resultados, ya que actualmente el curso cuenta con más de 30 participantes de todas las edades y profesiones, teniendo tan solo 6 años el participante más pequeño hasta los 68 años del participante más longevo. Hasta la fecha este diverso grupo, autodenominado “Robollota: grupo de indagaciones tecnológicas”, ha desarrollado aparatos para el riego automático, brazo robótico, lápices locos y autos de juego.

“Benjamín siempre ha estado interesado en la tecnología, desde pequeño le llama la atención los celulares y los computadores, por lo cual este taller me pareció una grandiosa idea para que se acercara un poco más a sus intereses de manera más positiva y activa”, relata Tatiana Ramos, mamá de Benjamín (6).

“Me encanta la dinámica del taller, los compañeros, es un grupo muy diverso, por lo cual las clases se hacen accesibles para todos y, por otra parte, yo no sabía nada de robótica ahora que conozco lo básico hasta me dan ganas de estudiar algo relacionado con esto”, comenta Ricardo Rosales, gastrónomo.

Del colegio a los barrios: robótica al alcance de todos

La robótica es una línea de trabajo que ha caracterizado el quehacer de Costadigital PUCV los últimos años, sin embargo, la atención estaba centrada en el desarrollo de habilidades tecnológicas en el sistema escolar con el proyecto Red de Clubes Maker, cuya finalidad era la implementación de talleres de robótica en 12 liceos TP del país.

Actualmente el foco de innovación se ha centrado en barrios donde la diversidad de personas contribuye al desarrollo de inventos cada vez más complejos y originales, al menos así lo demuestra la experiencia de muchos países tanto en América Latina como en Europa que se la han jugado por el tipo de innovación social.

“La experiencia de barrio es distinta, en un colegio es más impositiva y formal, acá la gente está porque quiere estar y la cultura la creamos nosotros mismos, por ello tenemos grados de libertad, participación y compromiso mucho más amplios”, cuenta Pedro Hepp, monitor del taller y coordinador de la línea de Robótica en Costadigital PUCV.

La segunda mitad del curso se centrará en concretar diversos prototipos que responden a los intereses puntales de cada uno de los integrantes del taller. “El aprendizaje es significativo en la medida que las personas desarrollen proyectos con los que se sientan conectados”, recalca Hepp.

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